martes, 18 de agosto de 2009

Pueblo chico, infierno grande

Y quién dijo que la vida de campo es más saludable?

Cada vez que llama por teléfono es para decirme que alguien murió.
Con lujo de detalles me comenta la desgracia.Los pormenores que acarrearrá semejante pérdida me los hará saber en una próxima llamada.
Era tan bueno, sano y limpito que jamás se imaginó que iba a terminar así, todo muerto el pobre.
Parece que le dió un ataque de no saben qué, dolorosas puntadas no saben dónde y quizás estuvo horas agonizando, justo para fallecer en domingo, con lo complicado que es eso.
Era separado.Su mujer, que no era para él, se fue hace muchos años. Puso una mercería sobre la ruta, aunque dicen que tal vez no sea sólo expendio de botones e hilo macramé.
Pensar que la hermana del difunto,que en paz descanse,es renga. Todavía vive, siendo ella mucho mayor .Ahora es hija única, además de huérfana,vieja, solterona y pijotera.
Al infelíz ni corona le compró.

Por suerte cada tanto también nace alguien.Sino el pueblo,vacío, moriría mientras duerme la siesta.

3 comentarios:

  1. Se está muriendo gente que nunca se había muerto...
    Ahora, por que no se murió antes nadie se lo explica, ¿no?.

    (Muy bueno el cuento)

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  2. Muy buenísimo el ritmo del microrrelato.
    El humor negro te queda muy bien (esto es un halago?)

    Muy lindo el final.

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  3. si si, el manejo del humor negro y la ironía está muy bien logrado.
    Impecable, produce una sonrisa a medio nacer en la comisura de la boca
    Saludos!

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Gracias!
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