De piedra y sombras es la tristeza que te extraña
Era un niño celeste y menudo.
El bosque fue su guarida,
con noches de pavor y dias de espanto.
Cuerpos luchando por fagocitar el odio,
ese odio desmedido carcomió las almas.
Era un hombre entero y en mil pedazos;
sabio, simple y transparente.
Supo renacer entre tanta muerte.
Pudo crear con migajas.
Ahora no alcanzan los gritos para llorarte,
y para honrarte no me alcanzan los silencios.
A mi papá
sobreviviente del Holocausto.
Esto es realmente potente!
ResponderEliminarExcelente!
Un verdadero homenaje a tu viejo y a todos los sobrevivientes del holocausto
y un verdadero canto a la paz
y a la memoria
Maravilloso, me conmovió muchísimo, pero mucho.
ResponderEliminarTiene una carga emocional y unas imágenes que muestran y viven al hombre que fue niño celeste y hombre entero y partido... y simple y creador y tanto...
Precioso homenaje
Besos